• Aceite de oliva en la cocina
• Uso del aceite de oliva

El aceite de oliva ha sido desde la antigüedad uno de los productos básicos tanto para la preparación de alimentos, para fines de cuidado, como una sustancia con beneficios médicos. El aceite de oliva es versátil, tanto culinaria como cosméticamente, por lo que no es de extrañar que hasta hoy sea indispensable en la mayoría de las cocinas y despensas del mundo.

Aceite de oliva en la cocina

Debido a su alto contenido en ácidos grasos valiosos, el aceite de oliva ofrece múltiples aplicaciones culinarias. Puede usarse tanto para curar como para freír, cocinar al vapor o hervir. Las opiniones sobre si se puede freír con aceite de oliva virgen extra están divididas, ya que algunos expertos dicen que afecta negativamente la estructura de los ácidos grasos. Otros, en cambio, enfatizan que los ácidos grasos monoinsaturados (presentes en altas concentraciones en el aceite de oliva) no se descomponen durante el procesamiento térmico, lo que lo convierte en una de las mejores grasas para freír.

El uso del aceite de oliva en la cocina no se limita a freír: puede añadirse a productos horneados, sustituyendo a la margarina o mantequilla. Su sabor y aroma únicos combinan perfectamente con diversas hierbas como orégano, tomillo o romero, así como con ajo, pimentón picante y pimienta negra. El aceite de oliva virgen extra es ideal para verduras frescas, quesos, ensaladas y pan. También es una excelente base para crear un menú vegano ligero y fácil de digerir.

Uso del aceite de oliva

Sin embargo, el aceite de oliva no solo se utiliza en la cocina, sino también en la cosmética. En muchos países se usa tradicionalmente para el cuidado del cabello, la piel y las uñas, para proporcionarles la lubricación e hidratación adecuadas. Puede usar aceite de oliva sin preocupaciones como parte del cuidado facial diario: para eliminar el maquillaje, como base para mascarillas de arcilla y para humectar la piel. Lo mismo para el resto del cuerpo.

El aceite de oliva puro o combinado con otros aceites como linaza o jojoba es adecuado para tratamientos de belleza en casa que se aplican en todo el cuerpo. El aceite de oliva de alta calidad, usado regularmente en el cuidado del cabello, es muy efectivo: desde calmar el cuero cabelludo, hidratar las puntas hasta restaurar la elasticidad del cabello.

El aceite de oliva puede aplicarse tanto internamente como parte de una dieta equilibrada, como externamente, en forma de compresas, mascarillas y exfoliantes. Es rico en antioxidantes, gracias a los cuales funciona tan bien como producto de cuidado. El contenido de vitaminas E y K protege el cuerpo tanto por dentro como por fuera, apoya el sistema circulatorio, el corazón, regula el nivel de colesterol y previene la formación de coágulos sanguíneos.

Los ácidos grasos insaturados apoyan eficazmente el metabolismo y eliminan toxinas del cuerpo. El aceite de oliva amplía sus aplicaciones también a problemas relacionados con el mantenimiento de un peso saludable e incluso la pérdida de peso. La regulación de los procesos digestivos combinada con supresores del apetito y actividad física puede actuar como un catalizador eficaz para acelerar la pérdida de peso. Hay muchas formas de usar el aceite de oliva, tanto en la cocina como fuera de ella, por lo que vale la pena probar tantas como sea posible para ver qué tan efectivas son.